La brutalidad del Ejército rusoen su invasión a gran escala sobre Ucrania salió a la luz después de la toma de las ciudades de Bucha e Irpín. Estos días se conmemoran los dos años de la liberación de ambos lugares.
Tras conocerse las atrocidades que los soldados del Kremlin habrían cometido en dicha ciudad, la Corte Penal Internacional abrió una investigación ante los supuestos crímenes de guerra. Es algo queconfirmó, a su vez, la Organización de Naciones Unidas.
Dos años después de la liberación de Bucha, un equipo de 'Euronews' se ha desplazado a esa zona para comprobar en qué situación se encuentran sus vecinos. Todavía sufren las secuelas de aquel dramático suceso.
Elimpacto de las bombasaún no se ha podido reparar en algunos lugares fundamentales para la población, como el hospital local de la ciudad. Las autoridades del municipio recuerdan con dolor cómo vivieron aquellos días.
Mykhayilyna Skoryk-Shkarivska era, cuandolos rusos invadieron Bucha, teniente de alcaldía. Asegura que tuvo que enterrar ella misma a algunos de sus vecinos. "Había cadáveres por todas partes", recuerda.
"La gente no tenía la posibilidad de enterrar a sus seres queridos en cementerios, los enterraban en sus patios, en las plazas, en nuestros parques... eso era muy impactante", nos cuenta.
Lo peor era tener que dar esa noticia a las madres
"Era muy difícil identificar a las personas asesinadas y comunicarle a los familiares que sus seres queridos habían muerto. Lo peor era tener que dar esa noticia a las madres", explica a 'Euronews' Skoryk-Shkarivska.
El **ejército ruso **atacó y se apoderó de Bucha e Irpín en el marco de su plan para llegar a la capital, Kiev. La defensa ucraniana destruyó el principal puente sobre el río Irpín para evitar el avance y finalmente consiguió liberar las ciudades.
