Movimientos populares se enfrentaron a la policía el miércoles durante una manifestación en el centro de Buenos Aires. Cientos de personas se concentraron frente a edificios gubernamentales para protestar contra las crecientes medidas de austeridad del gobierno de Javier Milei.
La policía utilizó cañones de agua para dispersar a los manifestantes, que intentaron bloquear una de las principales avenidas de la ciudad.
Las autoridades informaron de que al menos ocho personas fueron detenidas durante la operación. Las organizaciones reclamaban más prestaciones sociales para las familias empobrecidas.
Un protocolo de seguridad que entró en vigor pocos días después de la toma de posesión de Milei permite a las fuerzas federales desalojar o dispersar a los manifestantes que bloqueen el tráfico.
Los detractores de la ley sostienen que viola la libertad de reunión, asociación y expresión y no será la primera ley de Milei que la justicia tumbe, como por ejemplo la reforma laboral.