La estrella televisiva Kim Kardashian y Odell Beckham Junior, el afamado jugador de fútbol americano, habrían puesto fin a sus ocho meses de discreto noviazgo. Lo cierto es que ellos nunca han confirmado o desmentido los rumores sobre su idilio, pero ahora fuentes de su entorno aseguran que su ruptura se ha producido en términos absolutamente cordiales.
"Se ha terminado. Simplemente lo suyo se ha ido desinflando", ha contado un confidente a la revista People. Por otro lado, otro informante ha sugerido que ninguno de los dos tenía intención de forjar una relación de excesivo compromiso, por lo que la ruptura no habría sorprendido demasiado a sus respectivos entornos.
"Kim y Odell han estado ocupados con sus respectivas obligaciones. Kim no tiene mucho tiempo libre y nunca ha querido presionarse a la hora de comprometerse con nadie, o para tener una relación seria. Su objetivo es ser una madre práctica", ha explicado a Entertainment Tonight.
En los albores de su discreto romance, Kim y Odell establecieron unas bases muy flexibles para su tiempo juntos, marcadas, eso sí, por la necesidad de ser absolutamente honestos el uno con el otro. "Kim y Odell siempre han sido muy sinceros el uno sobre el otro sobre sus prioridades para el futuro. Se lo han pasado bien y no hay resentimiento de ningún tipo", ha añadido la misma fuente.
"Empezaron como amigos y lo seguirán siendo. Siempre han respetado sus respectivos espacios, carreras, familias y grupos de amigos", señala sobre la fundadora de la firma de ropa SKIMS, madre de cuatro hijos con su exmarido Kanye West.
Ya en febrero, el círculo más próximo a la empresaria describía su relación con Odell como una mera fuente de diversión. Descartaron tajantemente, por entonces, la posibilidad de que sonaran "campanas de boda" para la pareja. "Kim y Odell están muy cómodos el uno con el otro, porque están muy centrados en sus cosas y saben perfectamente que nada les va a limitar", explicaban conocedores del asunto al diario Daily Mail.
