Despliegue policial en Malmoe. Las autoridades suecas han puesto en marcha un amplio dispositivo de seguridad en las calles de la ciudad sueca ante la celebración del famoso Festival de Eurovisión. Cientos de agentes armados patrullan las calles con el propósito de proteger a los residentes y los miles de visitantes que se dan cita estos días en la localidad.
Un informe de la Policía publicado a principios de mes destacaba algunas de las posibles amenazas a la seguridad del evento, entre ellas los ciberataques. Además, preocupan las posibles protestas contra la participación de Israel en el certamen, a causa de la ofensiva de las tropas israelíes en la Franja de Gaza.
El año pasado se elevó a alto el nivel de alerta en Suecia, tras una serie de disturbios y quema de coranes, y se clasificó al país como 'objetivo prioritario' para el terrorismo islamista.
